domingo, 25 de diciembre de 2016

Dubai 2016

 
Buscando un vuelo asequible para la primera parte del puente de la constitución encontramos en Google flyghts  con Airfrance un vuelo Málaga-Paris-Dubai por 365 euros, así que nos decidimos y compramos el billete.
Buscamos alojamiento con buena relación calidad precio, y en principio reservamos 5 noches en el Ibis One Central.
Luego contactamos con Katrina, una antigua amiga que había estado en nuestra casa hace 15 años aprendiendo Español y ayudándonos con las niñas, y como vive allí desde hace 10 años nos invitó a su casa, así que aceptamos, pues aunque no nos gusta molestar, ella se iba al segundo día a Boston y nos dejaba su magnífico apartamento.
 
  
 
 
 
 
 
 
 
 
Además como ella trabaja allí en el sector del turismo, nos organizó un montón de excursiones a precio especial.
 
Así que el día 2 salimos en el vuelo Málaga París, con la sorpresa de encontrarnos en el avión con Sonja y su familia que se iban a la India, otra antigua amiga que estuvo también en casa aprendiendo Español.
 
 
 
Llegamos a Dubai a las 11:30 de la noche, compramos cervezas y vino en el Dutyfree, cambiamos un poco de euros en una oficina de cambio y cogimos un Taxi a casa de Katrina.
 
El aeropuerto esta muy cerca del centro de la ciudad, y los taxis son mucho más baratos que en Málaga, aunque hay que tener cuidado y coger solo los de colores, nunca los que son blancos y coches de alta gama, que aunque son taxis son tres veces mas caros. No todos los taxis admiten tarjetas de crédito, así que es mejor llevar AED que es la moneda de allí.
 
Después de los abrazos y un poco de charla, nos fuimos todos a la cama, pues Katrina tenía trabajo al día siguiente.
 
El día 3 cogimos un taxi hasta el principio de la estación del Monorail que lleva al hotel Atlantis en la Palmera de Jumerai
 
 
 
 
 
 
 
Al llegar al hotel fuimos a ver el aquarium "The lost Chambers"  que vale unos 30 euros la entrada.
 
 Es precioso y espectacular, pero para los que vayan después de leer este diario, decirles que ver el tanque principal solo, vale 8 euros, y que lo más bonito es este tanque, así que si se va un poco justo de dinero basta con ver solo esto.
 
 
 
 
 Comimos una hamburguesa dentro de los pasillos del hotel con aire acondicionado´y salimos al exterior a ver el paseo marítimo, pero no duró mucho el paseo pues hacía calor (30ºC) con humedad, así que volvimos al monorail.
 
 
 
 
 
 
 
Cuando salimos de la estación del monorail, un señor nos preguntó si queríamos un taxi y dijimos que si. Una vez en él Javier se fijó que no llevaba taxímetro, y yo le pregunté porqué. Me dijo que en Dubai había muchas clases de taxis y al preguntarle yo si ese era mas caro o mas barato que otros me dijo que más barato. Pero al llegar a la única playa pública que hay en Dubai, me quiso cobrar el triple de lo que esperaba, concretamente 118 AED. Le dije que ni hablar, que el recorrido no valía más de 35 AED. Contestó que era un servicio de Limusina (el coche era un Lexus) pero yo le dije que lo que había pedido era un taxi, y que llamara si quería a la policía porque no le pensaba pagar lo que pedía.
Al final, después de bajarnos nos dijo que le diera 50 AED y por quitármelo de encima eso hice. Así que cuidado con los taxis. Coger solo los de colores. Los blancos no.
 
Llegamos así como he dicho a la única playa pública, con la idea de tomarnos un café en un chiringuito. Craso error. No había ni un mísero bar. Eso si. La playa al lado del hotel Burj Al Arab
nos proporcionó unas buenas fotos, y el agua estaba magnífica.
 
 
 
 
 
 
 
 
Después del baño recorrimos andando  como 1 km hasta el Souk Madinat, un centro de restaurantes y tiendas que parece una Medina.

 
 
En esas fechas era la fiesta del 45 aniversario de la nación. Sorprendentemente joven.
 
 
 
 
 
 
 
Aprendida ya la lección, cogimos un taxi normal y nos fuimos a casa de Katrina, pues habíamos quedado en cenar juntos esa noche, pues era la única que teníamos, ya que ella se iba a Boston al día siguiente.
Comimos en un tailandés enfrente de su casa, que es la de la derecha de la siguiente foto. El sitio es espectacular
 
 
 
 
 
Al terminar se brindó a darnos un paseo en su fantástico descapotable para ver la noche iluminada de Dubai, por la zona del Burj Kalifa.
 
 
 
 
 
 
 
Al día siguiente fuimos en taxi a la puerta del Dubai Mall, punto de partida de nuestro recorrido en el BigBus por Dubai, organizado para nosotros por Katrina.
 
 
 
 
 
 
 
 
Zona del viejo mercado
 
El Creek de Dubai. Se puede cruzar en esas barquitas o por un túnel que hay más hacia el mar, pero solo para coches. Los peatones pasan en barcas.
 
 
El mercado del pescado. Mucho y variado
 
 

 
 
Pensábamos haber podido comprar algo de marisco para cocerlo en casa, pero leímos que no te permiten llevar pescado en un transporte público. Por otro lado un muchacho del mercado nos dijo que lo podían cocer allí mismo y comérnoslo allí. Menos mal que fuimos a ver el sitio antes de comprarlo, porque nos pareció supersucio y deprimente. Pero en fin, ya sabéis los no escrupulosos que existe esa posibilidad.
 
Continuamos visitando el zoco del oro y el zoco de las especies
 
 
 

 y como no encontramos en la calle ningún sitio donde comer acabamos comiendo en los grandes almacenes de Deria City center
 
 
 
No se privan de nada. Este es un autentico esqueleto de dinosaurio encontrado en Wyoming.
 
 
Llegamos de nuevo con el BigBus al comienzo de la línea roja en el Dubai Mall, y dimos una vuelta por este gran centro comercial. Los deportivos a la entrada eran increíbles.
 
 
Pista de patinaje sobre hielo
 
Aquarium con posibilidad de meterte en el con los tiburones de todas las formas posibles. Ver el gran tanque es gratis y merece la pena
 
 
Salimos al exterior a la zona de la gran fuente, pero el espectáculo de luz y sonido no empezaba hasta las 6, y no teníamos tiempo, así que dejamos esto para otro día y volvimos a coger el BigBus
 
 
 
Decidimos coger la línea verde y luego la línea azul hasta llegar a la parada mas cercana a nuestra casa que era la de Marina Mall. El paseo fue muy agradable viendo toda la zona de la costa, pero llevó bastante tiempo, y llegamos a casa a las 18:50, justo a tiempo de darnos una ducha, ya que nos venían a buscar a las 19:00 para llevarnos a una cena en barco por la marina de Dubai, excursión que nos había organizado Katrina.
La cena fue muy relajante y buena. El paseo por la marina y la base de la palmera espectacular
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 

 


 
Al terminar nos llevaron a casa.
 
El día 5 el plan era por la mañana subir al piso 125 del Burj Kalifa y a las 3 de la tarde nos recogía allí un coche para llevarnos a un safari en 4x4 en el desierto.
 
Así que nos levantamos pronto y decidimos ir hasta el Burj Kalifa en metro. La casa de Katrina tiene una parada muy cerca, 5 minutos andando.
Allí las distancias son muy grandes, y el recorrido que eran unos 25 km nos costó el equivalente a 2 euros cada uno.
 
Esta es la estación de metro, que por cierto, no va bajo tierra sino elevado.
 
 
 
 
Nos metimos en el vagón y nos sentamos en asientos vacíos. Al cabo de un rato una guardia jurado o algo así se acercó a Javier y le dijo que se levantara, que aquel vagón era solo para mujeres y niños y aunque había sitios de sobra se tuvo que levantar y traspasar la raya de separación entre hombres y mujeres. Bueno, en realidad no está prohibido que las mujeres vayan en el lado de los hombres, pero al revés si. Nos quedamos de piedra.
 
 
 
 
Yo creía que al llegar al Burj Kalifa íbamos a pasar mucho calor por la calle, pues hay que andar bastante. Pues no, todo esta muy bien pensado, y hay un pasadizo larguísimo con aire acondicionado y alfombras andantes que es como en los aeropuertos. Con razón no se ve nunca a nadie andar por la calle.
 
 
A la entrada del ascensor. La entrada cuesta 125 AED por persona. Unos 30 euros. Eso solo hasta el piso 125. Se puede subir también hasta el 148, pero es mucho mas caro.
 
 
En el ascensor
 
 

 
 
La pena es que el día no estaba claro. Había mucha calima. En realidad ningún día fue totalmente despejado.
 
 
 
 
Aquí se puede ver el tremendo pasillo desde el metro hasta el edificio mas alto del mundo, y todo lo que se continua construyendo.
 
Esta foto cogida de internet nos da una idea del tremendo desarrollo de Dubai en los últimos años
 
 
Al bajar visitamos parte del Dubai Mall y comimos en su food court, donde había todo tipo de comidas para elegir.
 
A las 15:00 acudimos al punto de encuentro donde nos iba a recoger el chofer de Sahara Tours que nos llevaría al desierto. La excursión fue genial y el chofer muy simpático y fantástico conductor.
 
 
 
 
Durante el recorrido nos contó muchas cosas sobre los emiratos árabes. Así él aunque había nacido allí, era Nepalí, ya que sus padres eran de Nepal, y nadie que vaya allí a trabajar puede conseguir la nacionalidad, ni siquiera los hijos nacidos allí.
Hay mucho trabajo, y los sueldos son muy altos, pero si te quedas sin trabajo y no encuentras otro en un tiempo prudencial te echan del país.
Mientras trabajas tienes seguro médico, pero si dejas de trabajar no tienes derecho ni a paro ni a seguro médico.
 
Llegamos así a un punto de encuentro de varias agencias, donde aparte de unas tiendas de souvenir, puedes alquilar cuads y montar a camello, pero el recinto es pequeño y no merece mucho la pena.
 
 
 
 
 
 
 
 
Lo más importante es que allí bajan la presión de las ruedas del coche para poderse meter por las dunas.
 
 
Y antes de la puesta de sol, comienza la aventura. Nos metemos en dunas cada vez mas altas, y es increíble como nuestro conductor consigue literalmente surfearlas. Sube rápido hasta la cresta y con un golpe de volante la desciende derrapando. A mi al principio me daba miedo, pero al final quería mas!!!
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Volvemos al coche para alcanzar la duna mas alta y ver la puesta de sol
 

 

 
 
 
 

Volvemos al sitio de las tiendas, y una vez ajustada de nuevo la presión de los neumáticos, nos llevaron a una edificación en medio del desierto para una cena al aire libre con espectáculo. La temperatura magnífica
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Bastante agotados, nos llevaron a casa hacia las 10 de la noche.
 
Al día siguiente teníamos contratada una excursión a Musandam, un territorio al norte de Dubai que pertenece a Oman, aunque está separado del resto de Oman por territorio de los Emiratos.
A esta región se le conoce como "la Noruega de Arabia", ya que en ella hay como fiordos, aunque sin vegetación.
 
 
 Nos vinieron a buscar al apartamento a las 6:15 de la mañana, y lo peor fue que eramos los primeros y mas lejanos, así que tuvimos que ir a buscar a tres parejas más, y juntarnos con otros en otro punto de encuentro, así que no salimos de Dubai hasta las 8:30. La excursión merece la pena, pero si alguien lee esto y la va a hacer es preferible ir en transporte público a un punto de encuentro cercano a la salida por carretera y evitarte así el autobús "del colegio".
 
Nos esperaba un recorrido largo de 2 horas, que al principio no es interesante pues pasas por muchos barrios de trabajadores de Dubai, pero luego se hace más interesante, con el desierto y sobre todo cuando se llega a la costa.
 
Había mucha niebla costera
 
Pasar la frontera de Omán nos llevó media hora, aunque el guía se ocupó de todos los trámites. También se puede pasar con coche de alquiler, pero hay que asegurarse que se contrata con cobertura en Omán, pues si no te impiden pasar.
 
 
 
 
Llegamos así al puerto de Khasab donde nos estaban esperando en uno de estos barcos
 
Resultaba muy cómodo todo con alfombras y cojines.
 
Nos adentramos en el fiordo hacia la isla Telegraph, acompañados de simpáticos delfines
 
 
 
 
 
 
 
El buceo de la zona no es extraordinario. Hay unos cuantos peces de colores, pero lo verdaderamente genial es el entorno y lo agradable del trato del personal.
Para comer, barracuda frita de la zona, ensalada, arroz acompañado de guiso de verduras y fruta.
 
 
La tripulación un capitán Omaní, ayudante Egipcio y guía de Sudán
 
 
 De regreso un poco de siesta
 

La vuelta a Dubai se nos hizo más corta, aunque casi siempre pasa eso al volver de cualquier sitio.
 
El siguiente era nuestro último día en Dubai, así que dejamos a primera hora la casa de Katrina con las maletas, y en un taxi fuimos a la oficina de Europcar donde habíamos contratado un coche para dejarlo por la noche en el aeropuerto, ya que nuestro avión salía a la 1:30 de la madrugada.
 
Una vez conseguido el coche (con GPS) cogimos la carretera hacia Abu Dabi para ver la gran Mezquita de Sheikh Zayed, la 4ª mas grande del mundo.
 
 
 
 
 
La entrada es gratis, pero las mujeres tenemos que ponernos una Abaya que ellos te suministran gratis para poder entrar.
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Hicimos después un recorrido por Abu Dabi visitando el hotel Emirates Palace y la corniche
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Comimos en un centro comercial cerca del Ferrari World y volvimos hacia Dubai.
 
Como no habíamos visto en el Mall de los Emirates la famosa pista de esquí fuimos allí.
 
 
 
 
 
 
 
 
Lo mejor fue el cervezón que nos tomamos en el bar apreski, el único sitio que encontramos con cerveza en todo Dubai
 
 
Otra vez cogimos el coche y esta vez aparcamos en el Dubai Mall, para ver el espectáculo de luz y sonido que tiene lugar por la noche el la fuente de debajo del Burj Kalifa
 
 
 
A las 9:30 cogimos el coche y fuimos al aeropuerto, donde tuvimos que dar 4 vueltas para dejar el coche de alquiler, pues está muy mal indicado y siempre nos pasábamos. Tomamos un sanwich y el avión salió puntualmente.
 
Un viaje fantástico que recomendamos hacer, aunque eso si, en invierno, pues en verano las temperaturas suelen ser insoportables según nos han dicho.